domingo

A toda la acumulación del mundo

Cuando hay una crisis
una alfombra roja se desenrolla más allá
de-la-sombra-maltratada-que-proyecta-un-elástico-tensionado-entre-dos-dedos-débiles-como-un-sintagma-en-medio-de-un-río-teñido-de-la-arquitectura-de-quien-perdió-la-g-u-e-rra
Cuando hay una guerra/el rostro de un anciano/bañado en sangre y mocos/FLOTA/plácido/perfecto/sobre la tina negra que un pequeño hombre ilustra en sus horas libres.
Cuando hay una crisis/cuando hay una sombra/cuando hay una guerra/la vivienda de los significantes/su particular aroma/la mano que tiende el pedazo de piel (hacia el siervo)/la mano que tiende este poco de tinta (hacia el siervo)/ y la mano que tiende esta mueca de viento y flores sin nombre (hacia el siervo)/la-mano-de-dos-dedos-débiles-como-un-sintagma-en-medio-de-un-río-teñido-de-la-arquitectura-de-quién-perdía-la-guerra/
la mano
esa mano
se vuelve contra sí
para recortar en forma de orificio total
ese músculo
que le da sentido a toda la acumulación del mundo.

sábado

Al encuentro de dos símbolos

Al encuentro de dos símbolos
estalla como grano en la cara
contra-dicción
resuelta en la utopía
del ex levantamiento popular,
Lluvia de coordinaciones
Multitud,
relámpago
efímero,
ansiedad de ayer en mañana
todas juntas y revueltas.
M-A-G-M-A

Y dos símbolos.

Carne en el desierto
flor en el desierto

son fuerza centrifuga
que enreda aún más este presente
escrito en grandes letras.

Un ser amado es un ser abandonado
dice una voz para el reverso de los símbolos.
Como entrar
cuando ya habitamos
una eternidad
allí dentro?

Y es que para entrar hay que antes salir.

Y escuchar a la hermana que te dice
que llevas el cuerpo con agua
(después del río-mar-océano).

Una entrada entonces
suena como algo que contar….

Una narración suspendida en un cuadrado
Un segundo antes de estallar.
Contra-dicciones?
Acaso nuestra dicción es mala?

Y continúa el vértigo.


Des-asidos en los símbolos.
En casa y en el mar.